Conducir con lluvia

Conducir con lluvia

conducir con lluvia

Conducir con lluvia

Conducir con lluvia o con el pavimento mojado es mucho más peligroso que hacerlo durante un día soleado y caluroso. El asfalto y los neumáticos mojados son una mala combinación, ya que quitan adherencia del vehículo a la calzada y puede facilitar resbalones, la pérdida de control del vehículo y originar un accidente. Tanto si se conduce un autocar, como un camión o un turismo, es recomendable tener en cuenta los siguientes consejos y recomendaciones para conducir con seguridad en un día lluvioso.

  • En la medida de los posible, evita realizar movimientos bruscos con el volante o dar frenazos que puedan hacer que las ruedas patinen.
  • Aunque la pintura blanca de los pasos de cebra y arcenes tiene un componente antideslizante, es preferible no pasar sobre ella y mucho menos frenar, porque agarra menos que el propio asfalto.
  • Reduce la velocidad y aumenta la distancia de seguridad. El «efecto spray» que provocan los coches que preceden al tuyo te restará visibilidad, por ello es mejor tener margen de reacción.
  • Enciende las luces de cruce y de posición para que los demás conductores puedan verte. Además, si la lluvia es muy intensa, también se recomienda usar las luces antiniebla traseras.

Recuerda que es mejor llegar tarde que no llegar.